Este suave exfoliante facial y corporal previene manchas y rugosidades en la piel y está especialmente indicado para pieles secas, sensibles y/o descamadas. La manteca de Karité es un aceite vegetal activo que proporciona una gran protección en tratamientos de pieles sensibles que han sufrido agresiones de frío, viento y sol, ayudando a calmar las irritaciones y fortaleciendo la piel. Junto a las Arenas Marinas y Aceites Esenciales permite realizar exfoliaciones frecuentes y no agresivas para la piel.
MODO DE EMPLEO:
Aplicar una generosa cantidad. Dejar actuar 2 ó 3 minutos y aclarar con abundante agua tibia. Para completar y potenciar sus efectos, aplicar a continuación Body Milk Karité.